Zidane se movía con la armonía de un solo ser con el balón. Con deslumbrante maestría y sofisticación técnica, él orquestaba el juego con pasión desbordante. Sus pases eran una obra de arte, como pinceladas https://tayatblz520338.blue-blogs.com/46347618/razones-que-llevaron-a-zidane-a-cabecear-a-materazzi